Season Of Mist está dando una muy buena pelea en lo que a excelente lanzamientos se refiere y para muestra un botón: Aealo (Rotting Christ), Lawless Darkness (Watain), Handful of Stars (Drudkh) son discos que no sería raro verlos a fin de año en listas de lo mejor del 2010, mejor aún es que llega otra muestra de lo que esta disquera va dando a conocer. Esta vez el disco es No God, No Satan de la banda francesa Otargos y tengo que admitir que nunca había escuchado hablar de la misma pero después de esta reseña pueden dar por un hecho que voy comprar algo de sus trabajos anteriores.

Otargos es una banda de Black Metal pero con una temática bastante original que se enfoca en la física cuántica, la teoría del caos, filosofía y cosmología; la idea que Dios no es mas que una paradoja viral desde un punto de vista cuasi-científico. Claro que a pesar de que una ideología tan interesante se presta para escribir letras con una buena retórica la música también hace lo suyo con una instrumentalización muy técnica que nunca deja de ser Black Metal. No es algo que vaya a revolucionar el pensamiento humano o cambiar  mis creencias pero si resulta muy satisfactorio el acercamiento al concepto de las letras.

Una de las características más notables de No God, No Satan es la ausencia de riffs que enganchen desde la primera nota del disco, claro que hay muchos y buenos durante varios temas pero no es un elemento predominante lo que convierte a este disco en uno de esos que hay que tomarle el gusto poco a poco. Pero es ahí donde surge un punto interesante ya que mientras que algunos álbumes van mejorando con el tiempo este es evidentemente bueno desde que se escucha la primera vez; para explicarlo mejor, este es un disco que desde el momento que se escucha se aprecia la calidad y el cual es innegable que llevó un buen tiempo en ser compuesto pero que simplemente hay que digerirlo. Hablando de digerir, solo para que se hagan una idea el tema Cuiusvis Hominis Est Errare pasa los 10 minutos y en el caso de  The Hulk Of Conviction And Faith tenemos 17 minutos de pura malevolencia (casualmente estos son los dos mejores temas del disco).

Por supuesto que no todos los tema son extensos y de hecho hay alguno que si acaso pasa los 3 minutos y el cual es parte de los dos cortes instrumentales I, Flesh Of God y I, Blood Of Satan. Pasando un poco a lo que es el sonido del disco en general no hay nada que sea diferente a los estándares del Black Metal, lo que se traduce en guitarras con buena distorsión y una batería con un sonido muy clínico que indudablemente eleva la horripilante atmósfera. Symphonic Black Metal, este disco no lo es.

Esta banda nos entrega un disco denso, trabajado y sumamente bueno, por lo que sería una lástima pasar por alto este álbum en un año con lanzamientos tan excelentes; el disco sale a la venta el próximo 30 de Agosto así que es una buena idea empezar a pre-ordenar desde ya; vale la pena.

-Calificación-